OMPRESS-VALENCIA (5-11-12) El pasado
viernes, tuvo lugar, en el trascurso del Congreso Nacional de Pastoral Juvenil
que ha tenido lugar en Valencia este fin de semana y que ha reunido a 2.000
responsables de este sector tan importante de la nueva evangelización, un
taller misionero con el título “Lo de ayer puede servir hoy”. Su objetivo,
presentar las experiencias misioneras que hacen los jóvenes -en tiempo de
vacaciones generalmente- como una aportación importante para la pastoral
juvenil.
El taller desarrollado en la parroquia San
Martín y San Antonio Abad de la capital del Turia, comenzó con el saludo de don
Anastasio Gil, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias en España,
que invitó a los asistentes a conocer la dimensión misionera de la Iglesia y a
participar en ella de forma activa.
Manuel Cuervo, de Jóvenes para la Misión de
Madrid, presentó a los ponentes del taller, el padre Juan Antonio Fraile,
comboniano, y Hugo Sancén, de Ekumene. Tras esta presentación se proyectaba el
vídeo del DOMUND de este año titulado “El misionero responde”, en el que se
explica de forma sintética la vocación misionera y la labor que realizan los
misioneros en todo el mundo. El vídeo termina con la pregunta al misionero: ¿eres
feliz?, a la que el misionero responde diciendo: “no lo sé, pero no cambiaría
mi vocación por nada del mundo”.
Este fue el punto de partida del taller.
Juan Antonio Fraile contó cómo llegó al Congo en 1994 como misionero, y el
estallido de la guerra en aquel país, unos meses después de su llegada. Afirmó
con convicción: “allí Dios me estaba esperando”. Mostró cómo una situación tan
difícil – en al que surge una y otra vez la pregunta “¿yo qué hago aquí?” - es
una oportunidad de experimentar la fe y la ayuda de Dios en momentos tan
difíciles. Sentir que no se está solo, sino en medio de los hermanos. La gente
le decía: “Tu Dios debe ser muy especial para que hayas dejado tu tierra para
venir aquí conmigo”.
Hugo Sancén relataba también su experiencia
de encuentro con Dios y su vuelta a la Iglesia. Afirmó: “No existe lo
imposible”, ya que desde muy joven en Querétaro, México, experimentó el
inconformismo, “si me hubierais conocido con 18 años... y hoy estoy aquí
hablando de las misiones”. Porque una misión entre los indígenas le llevó a la
experiencia de la fe. Recuerda el testimonio de un sacerdote de la misión que
visitó entonces: “Mi salud les pertenece a los indígenas”. Todo esto le llevó a
comprometerse con el trabajo pastoral de los salesianos en Estados Unidos.
Finalmente estuvo colaborando como voluntario con la asociación misionera
Ekumene en el Congo. Hugo resumía su experiencia misionera con la expresión
africana “ubuntu”, es decir, la capacidad de dejar huella en los demás para
bien o para mal. Terminó su intervención dirigiéndose a los participantes
-agentes de pastoral juvenil-, animándoles a invitar a los jóvenes a salir de
su mundo para conocer las necesidades de los demás y la realidad, a “abrir los
ojos”, para salir de “matrix” y vivir la vida que se les ofrece, ya que están
inmersos en un mundo tecnológico y hay que ayudarles a explorar las
posibilidades que existen en sus vidas.
A continuación se abrió el coloquio que
versó sobre la aportación de la misión a la pastoral juvenil aquí, que los misioneros
resumieron en el sentido de alegría que da la fe tal y como es vivida en otras
Iglesias. Se habló también de la necesidad de motivar a los jóvenes para dar el
salto y que se enamoren de Jesús, ya que la misión, sin enamorarse de Él es
imposible.
El taller concluyó ofreciendo la ayuda que
las Obras Misionales Pontificias pueden aportar a la pastoral juvenil para la
formación y participación en la misión. Se presentaron la revista misionera
juvenil Supergesto, la guía de experiencias misioneras Compartir la misión y el
décimo Encuentro Misionero de Jóvenes que tendrá lugar en Madrid del 12 al 14
de abril de 2013.
Hay que destacar que, además del interés y
la participación activa de los presentes también, hubo una amplia participación
de personas vía Twitter, al habilitarse el hashtag #vivelamision, que llegó a
más de 11.000 usuarios según tweetreach.