El pasado jueves 21 despedimos el curso desde el convento de La Pasión de las Madres Agustinas en San Felices de los Gallegos.
Después de la Eucaristía, compartimos un rato de convivencia con las hermanas cuya generosa acogida queremos agradecer.
También hicimos memoria de las actividades realizadas durante este curso dando gracias a Dios por habernos acompañado en todos y cada uno de nuestros proyectos. También la presencia de las voluntarias y los voluntarios ha sido fundamental en este curso en el que nuestra Delegación se ha atrevido a acometer grandes proyectos de los que hemos disfrutado juntos. Aún nos quedan actividades para compartir, y esperamos que el próximo curso podamos comenzar con igual entusiasmo para seguir aportando nuestro pequeño granito de arena al trabajo de los misioneros.